La fiesta de la
Epifania fue celebrada con la
participación de numerosos niños y sus padres. Al finalizar la
Santa Misa los fieles con el beso al Niño
Jesús manifestaban una intención personal de gratitud y de favor. Luego en el
jardín de la Parroquia
hemos compartido con los niños y los padres una competencia para romper con un
palo la “piñata” llena de caramelos, chocolates, golosinas, melindres. Una
alegría contagiosa también por nosotros los adultos. La colaboradora incansable
Maria Ramos, con los jóvenes del grupo parroquial “Cristo Rey”, se esmeró para
preparar la “piñata”, juguetes y cotillón.
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