La
Fiesta de la Nuestra Señora del Monte Carmelo, referida
popularmente como Virgen del Carmen o Nuestra Señora del
Carmen, es una de las diversas advocaciones de la Virgen María y goza de gran arraigo y popularidad entre
los devotos de Barcelona. El día 16 de Julio, a las 5.00 de la tarde, llegó el
Obispo Diocesano Mons. Cesar Ramón Ortega Herrera para celebrar la Santa Misa. Los sacerdotes Padre Ángelo
Ferraro, Padre David Millan, Padre Eduardo J. Cedeño, P. Luis Eduardo
Rabanales, P.Gerardo Uzcategui, P. Nehomar J. García concelebraron y numerosos
seminaristas acompañaron el Obispo
en la celebración eucarística. El P. Omar de la Catedral llegó tarde por un
compromiso pastoral.
Después
de la lectura del Evangelio el Obispo confirió la Orden de Acolitado a dos
seminaristas Raul Alberto Adrián Rojas y Olúger Torres Motta.
La
procesión ofertorial fue un momento de grande emoción por el Obispo que recibió
numerosos dones de parte de los niños de la Parroquia, de los familiares y
amigos de los dos seminaristas.
Luego
de la comunión eucarística el Párroco Padre Ángelo saludó al Obispo con estas
palabras:
“La presencia del Obispo Diocesano
ha dado algo –un quid- de solemnidad a esta celebración eucarística. ¡Precioso
día de jubilo! No solo porque estamos celebrando la festividad de la Patrona de
esta Iglesia, la Virgen del Carmen, sino también nuestro Obispo cumple los años
en este día. Una ocasión que se repite
año tras año y constituye ya una bella y grata tradición. Nunca ha faltado
Mons. Obispo – y son 14 años si la memoria no me traiciona – a este compromiso
espiritual y humano, tan estimulante para nosotros que nos permite alabar a
Maria Madre nuestra y al mismo tiempo, disfrutar, enriquecer el espíritu y
gozar de lo bueno que nos ofrece el cumpleaños.
Es cierto que Mons. Obispo tiene un
particular amor a la Virgen del Valle – fue Obispo de la isla Margarita – y por
eso ha deseado tenerla como peregrina en su Diócesis en este año de la Fe, pero
naciendo el 16 de Julio, día de la misma Virgen María bajo la advocación del Carmen, con la leche materna creció con
el amor a la Madre del Cielo. Definitivamente un Obispo mariano.
Aprovecho de esta ocasión para
agradecer públicamente al Padre Obispo de su visita a mi persona, enfermo por
una operación reciente, una vez en la Clínica de Puerto La Cruz y dos veces en
la casa de reposo de Palotál. Esto significa atención, estima y cariño a sus
sacerdotes. Son los dones que hacen que la humana existencia a pesar de todo,
merezca la pena de ser vivida.
Me llegaron muchas solicitaciones
para operarme en Italia – todo gratuito - No! Decidí operarme aquí y Dios me ha
premiado con la abundancia de cariño, de oraciones, de visitaciones cada día y
cada momento, de todos ustedes, mis queridos amigos.
Como es verdad la promesa de Jesús
en el evangelio: cien veces más a nosotros lo sacerdotes que hemos dejado todo
y te hemos seguido.
Gracias a Dios, gracias a la Virgen,
gracias a Usted querido Monseñor y feliz cumpleaños, gracias a los sacerdotes que
han honorado esta fiesta, gracias a los seminaristas – santa perseverancia
- y gracias a esta gente maravillosa que
es el venezolano. Un abrazo a todos”.
Al finalizar una sorpresa para todos: entró la retreta de
Barcelona con música alegre para cantar el cumpleaños feliz a Monseñor.
Numerosas tortas con la imagen del Obispo acompañaron el canto.
En el salón parroquial grande alegría con comida por todos los
gustos y bebidas.
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